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Recomendado como remedio que protege las células del hígado de las toxinas. Activa el trabajo de la vesícula biliar y los intestinos, mejora el metabolismo
100 ml
Аctive ingredients - sylibi mariani fructus
Оther ingredients - aqua, propylenglycolum, glycerolum
7-10 gotas 2-3 veces al día antes de comer
Almacenar durante 3 años a partir de la fecha de fabricación en un lugar seco y protegido de la luz solar directa a una temperatura no superior a +25ºС y una humedad relativa no superior al 85%. Una vez abierto, se recomienda utilizar en un plazo de 6 meses.
Intolerancia individual a los componentes
Frutos de cardo santo — contienen flavonoides, flavonolignanos, alcaloides, saponinas, proteínas, aceite graso, vitaminas liposolubles - A, D, E, K, resinas, tiramina, moco, histamina, macro y microelementos: magnesio, potasio, calcio, cromo, yodo, selenio, vanadio, estroncio, pero la más importante es la sustancia silimarina, es ella la que aporta en gran medida las propiedades hepatoprotectoras del cardo santo. Es por eso que el cardo santo se usa en terapias complejas y en la prevención de la disfunción hepática. Es eficaz contra los efectos tóxicos de sustancias nocivas, haciendo que la membrana de las células del hígado sea menos permeable a ellas. El cardo santo ayuda a neutralizar los radicales libres y aumenta el nivel del principal antioxidante, el glutatión, reduce la inflamación y las cicatrices del hígado, reduce los efectos de las drogas y las toxinas y ayuda al hígado a regenerar los tejidos. El cardo santo inhibe la multiplicación de virus en el hígado y el crecimiento de tumores malignos.
El cardo santo ayuda a reducir los niveles altos de colesterol, ayuda a limpiar la sangre y previene el daño arterial. Apoya los sistemas endocrino y digestivo, promueve la producción de enzimas, aumenta la producción de bilis, elimina la acidez y calma la mucosa del estómago.
El cardo santo también desintoxica el cuerpo de los desechos metabólicos, regulando así la función de la vesícula biliar, ayuda a prevenir cálculos biliares y cálculos renales.
Las propiedades antiinflamatorias y antioxidantes del cardo santo son neuroprotectoras y ayudan a prevenir el deterioro mental.